Envejecido de madera.

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Envejecido de la madera.

A la hora de envejecer madera, existen tres factores importantes a tener en cuenta y que nos determinarán que técnica se adecúa más al trabajo que queremos hacer:

1.- Tamaño y espesor de la madera.
Para maderas con un grosor inferior a los 3mm se recomienda la técnica de tintado suave. La utilizaremos sobre todo para suelos, paredes y componentes pequeños y/o medianos.

Para las maderas con un espesor entre 3 y 5 mm, se obtienen óptimos resultados utilizando el envejecido en 2 pasos.
Esta forma de envejecido es útil para piezas como mástiles, columnas, pivotes y piezas medianas.

Para envejecer la madera con un grosor superior a los 5mm, resulta muy útil la técnica "wet and dry" que ya explicaremos en otro truco.
Este sistema de envejecido, es práctico para piezas grandes como peanas o bases, o incluso también para piezas grandes de decoración.

2.- Tipo de madera.
En cuanto al tipo de madera, hay que tener en cuenta, que cada madera tiene un tipo de veta y de porosidad.
Esto nos puede ser útil a la hora de aplicar una u otra técnica para su tratamiento.

3.- Cantidad de factor "envejecido" que deseamos obtener.
La cantidad de envejecido nos pone "freno" una vez puestos a envejecer. Hay que tener muy claro cuanto envejecido se quiere aplicar, y sobre todo, donde NO se quiere llegar. Es mejor quedarse corto, puesto que siempre podremos aumentar el tratamiento, que pasarse, ya que una vez aplicado no se puede volver atrás.

Empecemos...

Para este ejemplo trabajaremos con unos listones de 7x2mm.
Preparamos la superficie lijando con lija de grano muy fino, 600 como mínimo.
Lijamos en el sentido longitudinal de los listones.
En este caso y a modo de ejemplo, se han efectuado una serie de taladros, simulando la ubicación de unos clavos.
Como se puede apreciar, una vez efectuados los agujeros, lijamos de nuevo por encima de los mismos.

Para el envejecido base de madera a la intemperie, utilizaremos:

  • Pintura negra
  • Alcohol
  • Papel
  • Un recipiente
  • Un pincel
Vertemos un buena cantidad de alcohol en el recipiente.
En la fotografía se muestra más o menos la cantidad y 1 gota de color negro. Una gota es más que suficiente para esta cantidad de alcohol.
Removemos con el pincel hasta que se disuelva por completo la pintura.
Con el pincel empapado en el tinte, aplicamos de forma generosa.
Una vez tintada toda la superficie, esperamos a que se evapore el alcohol.
Pasamos un papel para eliminar cualquier rastro de polvo y de paso lo acabamos de secar.
Volvemos entintar la zona de los clavos.
Secamos de nuevo.
Esto es opcional.
Si se desea dar un poco de tono diferente a los "clavos" podemos aplicar un poco de color marrón chocolate de Vallejo, con la ayuda de una aguja o cualquier elemento que nos quepa en los orificios que hemos practicado en la madera.
Pintamos con una gotita de color el interior de los agujeros.
Con la parte posterior de la aguja podemos redondear las marcas.
Con la punta de la aguja, practicamos unas estrías desde el agujero hacia el exterior, como se muestra en la imagen.
Volvemos a tintar la zona de los clavos.
Ya tenemos la madera con un suave envejecido.
Comparamos el tono con el color de la madera sin tratar y se hace evidente el trabajo realizado.
Ahora mostraremos como aplicar una capa de pintura encima de la madera envejecida, para acentuar más el estado de abandono.
Podemos delimitar la zona a pintar. En este caso se ha marcado la mitad para que se pueda comparar el resultado.
Con el color escogido, (en este caso verde, pero cada uno que aplique el que desee o necesite)...
... aplicamos una sola capa de pintura no muy gruesa.
Acto seguido y sin perder tiempo tapamos la pintura todavía fresca con cinta de enmascarar y aplicamos presión sobre toda la zona pintada.
Quitamos la cinta de carrocero y nos quedará algo parecido a esto.
Con el pincel empapado en nuestro tinte negro, damos un repaso por toda la zona.
Esperamos a que se evapore el alcohol.
Con la ayuda de un papel, frotamos ligeramente encima de algunas áreas pintadas.
Empapamos el pincel con pintura marrón chocolate y eliminamos el exceso de pintura del pincel con un papel.
Damos unos toques aleatorios por donde deseemos agudizar mas el desgaste o suciedad.
Y ya tenemos una pared sucia y desgastada como si hubiese pasado mucho tiempo en el campo sin que nadie la cuidase.
Se aprecia la diferencia entre la zona pintada y la que no.
Y evidentemente con la madera no tratada.
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